Puede que Sri Lanka parezca pequeña, pero gracias a sus montañas cubiertas de jungla, sus playas vírgenes de arena dorada, su abundante vida silvestre en los diferentes hábitats naturales y gastronomía a base de especias; ofrece muchas actividades para hacer durante nuestro viaje de vacaciones.
Pero con tantas cosas increíbles que hacer en Sri Lanka para elegir, puede ser difícil saber qué experiencias son «imprescindibles» y cuáles son más prescindibles si no contamos con más de diez días o dos semanas. Por esa razón, te animamos a que leas esta sección con calma y navegues por la web, de manera que aproveches al máximo tu estancia.
QUÉ HACER EN SRI LANKA
Templos e Historia
Los espacios religiosos de Sri Lanka te dejarán sin habla, y es que la devoción, cuidado y respeto que desprenden hace que visitarlos sea toda una experiencia. Algunos de esos templos tienen cientos o incluso miles de años, y fueron capitales de reinos en los que el poder político, religioso y social emanaba concentrado en sus urbes. En el interior de Sri Lanka se puede dibujar un triángulo cultural en el que encuentran las ciudades de Anuradhapura, Polonnaruwa y Sigiriya.
Anuradhapura es uno de ellos, con dagobas de tamaño colosal como Jetavanarama, mientras que Polonnaruwa fue tras la caída de Anuradhapura, la segunda capital de Sri Lanka desde 1070 hasta 1232. Ambas son Patrimonio de la Humanidad de la Unesco y se pueden visitar caminando, en bicicleta o tuk tuk.
Dambulla es otro de esos lugares mágicos, con impresionantes cuevas que albergan decenas de estatuas de budas y dioses en su interior, bajo techos naturales decorados con frescos.
La ciudad de Kandy es un centro espiritual vivaz, que sigue generando peregrinaje de fieles para visitar el Templo de la Reliquia del Diente Sagrado, que según los budistas perteneció al mismo Buda. Únase a los devotos para agregar sus propias ofrendas de pétalos y encender velas votivas. Si su visita coincide con el espectacular Festival Esala Perahera, una celebración de finales de junio y principios de julio que rinde homenaje a la Reliquia del Diente Sagrado, vivirá una de las fiestas religiosas más importantes de Sri Lanka.
Pasado colonial
Sucumba a los encantos coloniales de Galle, la fortaleza portuguesa, reforzada por los holandeses en 1663, y cuyas murallas permiten pasear mirando el mar. Dentro del fuerte, encontrará edificios coloniales holandeses, mezquitas e iglesias antiguas, museos, muchos cafés y restaurantes de moda.
DEPORTE EN SRI LANKA
Sri Lanka se presta para practicar todo tipo de deportes, tanto en la costa, habitual meta para los surfistas, como en el interior, ideal para el trekking. Todo ello sin olvidar el golf, rafting y el buceo.
Trekking
Sri Lanka con su paisaje de junglas, campos de té y montañas ofrece posibilidades maravillosas para el trekking y senderismo. Los que deseen combinarlo con la espiritualidad de los templos pueden animarse a subir a Adam’s Peak, cuyas escaleras parecen subir al cielo. Otros se conforman con el Little Adam’s Peak, que no es tan turístico y cuyo regalo son las vistas de los alrededores de Ella. El Parque Nacional de las Llanuras de Horton es un parque nacional en las tierras altas centrales de Sri Lanka muy recomendable para pasear intercalando con bosques y hábitats de inmensa belleza fotográfica.
Diyaluma Falls es la segunda cascada más grande de Sri Lanka y es el lugar perfecto para una aventura de un día completo. Hay múltiples cascadas y piscinas naturales a lo largo de esta caminata en la región de Badulla.
Hacer senderismo en Riverston proporciona algo único y alejado de las multitudes. La caminata discurre hacia la cordillera de Knuckles y las tierras altas circundantes. El final de la caminata termina con una fuerte caída de 300 metros con vistas del valle de Thelgamuwa, los campos de arroz en terrazas y la cordillera de Knuckles. Este lugar se llama ‘El fin del mundo’.
Submarinismo y buceo
Si hay un lugar que destaca sobre los demás para bucear, sin duda es la Pigeon Island, la Isla de las palomas cerca de Trincomalee.
Se trata de un impresionante parque nacional marino que protege tanto la isla como las aguas que la rodean. En Pigeon Island podremos ver tortugas, tiburones, corales de hermosos colores y muchas especies tanto de peces como otros seres del fondo del mar.
La isla se encuentra frente a la costa de Trincomalee y Nilaveli, dos destinos turísticos muy populares en Sri Lanka. La entrada al parque incluye una tarifa de parque nacional.
Surf
Sri Lanka es un lugar increíble para aprender a surfear, si lo dominamos cabalgar sobre las olas. Con una costa aparentemente interminable, alquileres de tablas baratos, lecciones y olas perfectas para todos los niveles, si no nos subimos a la tabla para aprender a surfear en el viaje a Sri Lanka, no tenemos excusas.
El surf en Sri Lanka es mejor en la costa oeste entre los meses de enero a abril y en la costa este entre mayo y julio. Una de las mejores playas para estudiantes es Weligama Beach. Otro lugar famoso es Arugam Bay, donde se concentran bastantes escuelas de surf allí. También hay que mencionar la costa sur de Sri Lanka, donde la selva es tan frondosa que muere en las platas.
Y para la practica kitesurf, la remota península de Kalpitiya con numerosas lagunas de aguas tranquilas y mucho viento constante, es el lugar idóneo. La costa noroeste de Sri Lanka ofrece algunos de los mejores lugares para practicar kitesurf en el mundo. A apenas 3,5 horas en coche al norte de Colombo se encuentra la poco conocida península de Kalpitiya. La región alberga playas de arena y pequeñas aldeas de pescadores con manadas de burros salvajes que pasean por grandes praderas.
Amanecer con las mejores vistas de Sigiriya
Ascender a lo alto de la roca de Pidurangala permite disfrutar de las mejores vistas del yacimiento de Sigiriya. El mejor momento es antes del amanecer, para estar en el momento preciso en el que el sol cubre de luz la selva y pinta de color el paisaje ante nuestros ojos.
No lejos divisaremos Sigiriya, una enorme fortaleza de roca con las ruinas de un antiguo palacio, jardines acuáticos y frescos cerca de la roca de Pidurangala donde nos encontramos.
Sigiriya, la roca del León
Sigiriya (siglo V d.C. ) es una hazaña arquitectónica verdaderamente asombrosa. La fortaleza en la parte superior ha sufrido guerras e asedios, y su situación en lo alto de la roca a 200 metros sobre la jungla la hacía en su día inexpugnable. La fortaleza, Patrimonio Mundial de la UNESCO, se compone de palacios abandonados, estanques, cursos de agua, canales, escaleras y muros. Pero sobresalen las pinturas sobre la piedra conocidas como las damas de Sigiriya, frescos que sorprendentemente aún se conservan.
NATURALEZA Y SAFARIS
La naturaleza de Sri Lanka es uno de los puntos fuertes para que se haya convertido en un referente internacional del turismo. Si apreciamos la vida salvaje deberemos ser pacientes, y sobre todo entender que no se trata de un zoológico, y los animales no están allí posando a la espera del viajero.
Parques Nacionales
En los diferentes parques nacionales tendremos opción de ver animales de gran tamaño como búfalos, cocodrilos o elefantes, hasta los felinos leopardos, ciervos, monos, jabalíes y toda una selección de aves que en pocos lugares del mundo podremos ver ante nuestros ojos. El Parque Nacional de Bundala es el hogar de casi 200 especies de aves nativas y migratorias.
De hecho, si hay un lugar en el mundo donde la concentración de leopardos es más alta, es en el Parque Nacional de Yala, por lo que probablemente tenga la suerte de verlos. Por otro lado, el Parque Nacional Udawalawe es uno de los mejores lugares para ver elefantes.
Y para ver la congregación de elefantes asiáticos más grande del mundo, visite Kadulla o Minneriya en la estación seca (junio/julio a septiembre) cuando se lleva a cabo lo que se conoce como «la reunión» cuando cientos de paquidermos se agrupan alrededor del agua para beber y refrescarse.
Evite los lugares donde se mantienen elefantes en cautiverio, excepto el Elephant Transit Home en Udawalawe. Dirigido por el departamento de vida silvestre del gobierno, con el apoyo de la Fundación Born Free, este centro de rehabilitación acoge crías de elefantes abandonadas y heridas y las devuelve a la naturaleza una vez que se han recuperado.
Avistamiento de ballenas
Sri Lanka es un lugar de paso y alimentación de las ballenas, desde la ballena jorobada a la azul, pasando por cachalotes y delfines. Aprovechan para llenar el estómago con krill y calamares que abundan en sus aguas, enriquecidas por la desembocadura de los 103 ríos de Sri Lanka.
En la costa oeste, durante los meses de diciembre a abril es cuando las ballenas están surcando sus aguas, siendo abril el mejor mes. En la costa este, la temporada comienza en julio y se extiende hasta septiembre.
Los mejores lugares para hacer tours de avistamiento de ballenas son Mirissa y Hikkaduwa en la costa suroeste y Trincomalee en la costa este.
De enero a abril, las ballenas azules pasan por aquí en su ruta desde la Bahía de Bengala hasta el Océano Índico occidental. Se llenan el estómago con krill y calamares que prosperan en estas aguas, enriquecidas por la desembocadura de los 103 ríos de Sri Lanka.
Tortugas
Por otro lado en la costa tendremos oportunidad ver los nidos de tortugas, velados por voluntarios que tratan de preservarlas con liberaciones en el mar en playas como Hikkaduwa, Mirissa, Unawatuna y Galle. Los más afortunados igual se topan con alguna de mayor tamaño bajo el agua, mientras bucean en superficie o llevan a cabo alguna inmersión.
Hay dos lugares en Sri Lanka que ofrecen las mejores oportunidades para ver tortugas en la naturaleza, Hikkaduwa Beach y Polhena Beach (al sur de Mirissa). En ambas playas, puedes nadar desde la orilla y literalmente acercarte a metros de enormes tortugas marinas.
Probar la gastronomía de Sri lanka
Tanto si come una comida casera en una casa de huéspedes, como si se decide a compartir mesa con la gente local en los restaurantes, como si prueba los cursos de cocina para descubrir la gastronomía de Sri Lanka, estará consiguiendo ser parte sustancial del país a través de la comida.
Los habitantes de Sri Lanka comen una dieta mayoritariamente vegetariana que consiste en lentejas, remolacha, mango y pimientos. También usan mucho coco, incluido el aceite de coco y la leche de coco.
Ninguna otra comida captura tanto a Sri Lanka como el kottu roti. Esta popular comida callejera es una mezcla rica en carbohidratos de verduras frescas, sobras de roti (pan sin levadura) y huevos, además de una selección de carnes o mariscos. El Kottu roti está disponible en toda la isla, pero pruébelo en Colombo en Galle Road. Pida el suyo con un vaso de Milo helado (un popular bebida de malta de chocolate), que combina perfectamente con un kottu caliente.
El curry de cangrejo de Jaffna se considera el mejor del mundo, especialmente cuando se prueba en la fuente, donde los chefs se toman su tiempo para moler el coco, lo que hace que la pasta esté tostada y rica. En el sur, pruebe el Squid Curry, cocinado rápidamente en crema de coco y jugo de lima.
No menosprecies Colombo
Es verdad que no es la ciudad más bonita del mundo. Y también que, a Sri Lanka, se viene a conocer la parte más salvaje. Sin embargo os recomendamos pasar un día en la Colombo y recorrer los extraordinarios templos. Por ejemplo, el Templo Gangaramaya es un impresionante templo budista junto al lago Beira, lo que le da un ambiente tranquilo y sereno. El templo Sri Kailawasanathan Swami Devasthanam es uno de los templos hindúes más antiguos y ornamentados de la ciudad. Y el Templo Koneswaram, en lo alto de un promontorio rocoso, rodeado por el mar, es merecedor de una escapada.
Volar sobre la playa
No se trata literalmente de volar, y aunque no es evidentemente el único ni el más original de los columpios que buscan los instagramers, ver el atardecer en el famoso columpio de cuerda en Dalawella se ha convertido en una foto preciada.
La ubicación del columpio es en Dalawella Beach, que se encuentra en el sur de Sri Lanka, cerca de la popular ciudad de Unawatuna.
Secretos hasta para los locales
Hay rincones de Sri Lanka que son desconocidos incluso para ellos mismos. Los viajeros intrépidos que buscan alejarse de los caminos trillados pueden escaparse al puñado de islas en el extremo norte de Sri Lanka. La más grande de ellas es Neduntivu (también llamado ‘Neduntheevu’ y llamado Delft por los holandeses), hogar de aproximadamente 4500 personas y manadas de caballos salvajes. En este lugar perdido lo más destacado es el fuerte holandés construido con coral y el árbol baobab gigante, que se rumorea que tiene más de 1,000 años.
Actividades únicas
Dicen que los viajes en tren por Sri Lanka son una experiencia inolvidable, y es cierto que hay algunos itinerarios que han sido incluidos como los más bonitos para hacer en ferrocarril. El tren que va de Ella a Kandy -o al menos hasta Nuwara Eliya– es posiblemente el más conocido.
Recorre algunas de las áreas más impresionantes de Sri Lanka y atraviesa las extensas plantaciones de té en las Tierras Altas. El punto panorámico más fotografiado es el viaducto del Nine Arch Bridge, un puente en curva por el que pasa el tren y donde muchos viajeros se bajan.
Aprender todo sobre las especias
Sri Lanka siempre fue un territorio excepcional para el cultivo de especias, y los europeos se aprovecharon durante siglos para comerciar. En los «Jardines de especias» (Spice Gardens) de Matale podrá conocer cómo se cultivan, viendo, tocando y oliendo las plantas que dan lugar a a la canela, la pimienta, el cardamomo, o la nuez moscada.
Conocer el origen de la canela
Prueba la mejor canela del mundo en la Sri Lanka, en el kilómetro cero donde se elabora. Y es que la famosa «canela en rama» se extrae de la corteza del árbol, y después de secarla se emplea para endulzar los postres de todo el mundo.
La llamada isla de la canela (Cinnamon island) está situada en Bentota en Sri Lanka. Esta es una isla pequeña, pero encantadora, que ofrece algunas actividades divertidas para ti. Aquí podrá aprender sobre el cultivo de canela durante la parada del safari en barco por el río Madu Ganga, y ver con tus ojos una demostración de como se obtiene. Los peladores aprenden y transmiten el oficio de generación en generación, retirando magistralmente finas capas de la corteza interior del árbol para crear canela. Puede comprarlos junto con pequeños paquetes de canela en polvo y aceite de canela.
Explorar las vastas plantaciones de té
Sri Lanka es mundialmente famosa por el té. En la zona montañosa del denominado ‘triángulo cultural’, el té crece en cada ladera. No solo es un gran lugar para probar el té más fresco y barato del mundo, sino que las vistas también son impresionantes.
Hay muchos lugares para pasear por los campos de té en Sri Lanka, y algunos de los más populares son Ella, Nuwara Eliya y Haputale. ¡También puede dar un paseo por los campos de té, visitar las fábricas de té y aprender todo sobre cómo se hace el té de principio a fin!
Aproveche el viaje por Sri Lanka para probar todo el té que pueda. De hecho, si pasa Nuwara Eliya, puede acercarse al Grand Hotel para tomarlo como los británicos en época colonial, en uno de los edificios más suntuosos de Sri Lanka. Es un muy buen lugar para probar una selección de tés de gran calidad preparados por profesionales.
Conducir un Tuk Tuk
Valga como aviso que conducir un tuk tuk no es para todos. La conducción en Sri Lanka no es sencilla, y al tráfico denso en algunas ocasiones se junta el hecho de que haya animales en la carretera. Pero para los más animados puede ser una opción para moverse por Sri Lanka, singular y que permite ir a tu aire.
Mezclarte con la gente local
Una de las mayores riquezas de Sri Lanka es su gente, y no es un tópico. Siempre amables y vistiendo sonrisas, cualquier gesto de interactuar con ellos es bien recibido. Si coincide en una celebración, boda o festividad, se mostrarán hospitalarios y siempre con respecto puede pedir permiso para sacarles fotos, o incluso con ellos.
La mayor parte de la población es budista, aunque la etnia tamil suele ser hinduista, existiendo también una pequeña parte de la población musulmana y otra católica. Todos ellos viven en paz y tolerancia, respetando las creencias de los demás.
Los Vedda son el pueblo indígena de Sri Lanka. Originalmente habitantes de los bosques, su número ha disminuido a lo largo de los años debido a la migración, la pérdida de hábitat y la asimilación a la cultura cingalesa-budista dominante de la nación. Ahora esparcidas por la isla en pequeños números, algunas familias Vedda aún conservan su idioma nativo, su cocina y sus rituales en lugares como Dambana, un pueblo indígena y museo en la parte sur del Parque Nacional Maduru Oya.