Independientemente de las creencias religiosas del viajero – o la ausencia de ellas-, los hermosos santuarios, las estupas, las cuevas, y sobre todo, el maravilloso entorno, hacen que la visita a Mihintale sea imprescindible en nuestro viaje a Sri Lanka.
Considerada la montaña sagrada para el budismo, aún hoy, miles de años después, las peregrinaciones que acoge para conocer la cuna y lugar donde se introdujo el culto a Buda, son masivas.
Contemplar las llanuras alrededor de Anuradhapura desde Mihintale es una oportunidad maravillosa para divisar el paisaje de la zona norte central, donde su hábitat aún depende de la preciada agua de los lagos y canales construidos por los antiguos reyes.
Historia de Mihintale
La historia de Mihintale es la historia del budismo en Sri Lanka, que comienza con la historia del monje budista Mahinda, ya que esta es, literalmente, la Montaña de Mahinda. Aquí fue donde el evangelizador Mahinda, hijo del emperador Asoka, llegado desde India, convirtió al rey Devanampiya Tissa al budismo en el año 243 a.C.
La leyenda cuenta cómo el rey Tissa perseguía a un ciervo durante una expedición de caza. El animal llegó a Mihintale -cuyo nombre era Missaka Pabbata o Cetiyagiri o Sagiri- y huyó colina arriba seguido por el rey, hasta llegar a un lugar donde el animal desapareció. El frustrado rey se asombró al encontrar a una persona amable que le hablaba de las enseñanzas de Buda. Mahinda habló con el rey del budismo y recitó el Culahastipadopama y otros sutras.
Mahinda probó la fe del rey, y al comprobar que era digno de convertirlo al budismo, selló la alianza entre el poder político y el religioso. Se cree que la fecha de este encuentro entre el rey Devanampiya Tissa y el monje budista fue la luna llena de junio del año 247 a. Poco después, el rey (y 40.000 habitantes de Anuradhapura) se convirtieron al budismo, extendiéndose el culto por todo Sri Lanka. Una leyenda de la llegada del budismo a Sri Lanka cuenta que el propio Buda viajó a la isla, a lomos del gran semidiós alado Garuda.
Gran parte de la historia de Mihintale quedó recogida en el Mahavamsa, la Gran Crónica de Sri Lanka, compuesta en verso pali por el monje budista Mahanama. Con la llegada del budismo a Sri Lanka, la montaña Mihintale comenzó a servir como área residencial para los venerables monjes encabezados por Arahath Mahinda Mahathera.
En los primeros años que siguieron a la llegada de Arhath Mahinda, Mihintale era simplemente un santuario de los monjes budistas que vivían en cuevas de roca y que no estaban preocupados por construir un refugio ni una estructura organizativa monacal. Con el transcurso del tiempo, Mihintale se transformó en un monasterio bien organizado con Dathu Ghara (Sinhala: cámara de reliquias), Dana Sala (Sinhla: salón de limosnas), Sannipata Sala (Sinhla: salón de actos), Arogya Sala (Sinhala: hospital) y se convirtió en ser conocido por Chetiya Pabbatarama que se convirtió en el hogar de más de 2000 monjes budistas ascéticos.
Con el crecimiento de la comunidad de monjes y laicos piadosos, el rey Sena II (853-887 AC) había construido un hospital en la base de la montaña. Afortunadamente, las ruinas de algunos de estos edificios todavía se pueden ver hoy, lo que hace de Mihintale el viaje de un día perfecto desde Anuradhapura.
Mihintale es uno de los 16 lugares de peregrinación («Solosmasthana», lugares sagrados»), y el festival de luna llena de Poson (junio) en particular atrae a miles de peregrinos. Los tres tramos de escalones de granito hasta la cima, que suman alrededor de 1840 peldaños, llevan al peregrino, protegido por las sombras de los extensos árboles, hasta el templo de la cima. Fueron construidos durante el reinado de Bhathika Abhaya (22-7 a. C.), si bien posteriormente se acondicionó un camino asfaltado que permite ahorrar parte del trazado.
Visita – Qué ver en Mihintale
Situada a 12 kilómetros al este de las ruinas de la gran ciudad de Anuradhapura, la montaña sagrada de Mihintale se considera como decíamos el primer lugar donde se introdujo el budismo en la isla de Sri Lanka. La mayoría de los principales sitios de interés se pueden visitar en un recorrido de 3 horas.
El pico de Mihintale, al que se accede por una gran escalera de 1.840 escalones de granito, tiene muchos templos, alojamientos para monjes y varias espléndidas estatuas de Buda. Cada mes de junio, durante la luna llena, hay una peregrinación que conmemora la fecha en que Mahinda predicó por primera vez la doctrina budista en Sri Lanka y muchos miles de peregrinos llegan de todas partes de Sri Lanka para meditar en la cima sagrada.
Al pie de la montaña Rajagiri se encuentran las ruinas de cuevas con inscripciones de Brahmi, del refectorio donde comían los monjes, y de un antiguo hospital, mientras que a lo largo del tramo de escaleras que sube la montaña se encuentra el Kantaka Ceitya del siglo II a. C., el Mandapaya (pabellón), el Baño del León, la dagoba Ambasthala , el Aradhana Gala y en el pináculo está la dagoba Maha Seya del siglo I a. C.
ZONA BAJA DE LA MONTAÑA
Kaludiya Pokuna (Pond of Black Water)
A menudo el espacio conocido como el Estanque de Agua Negra (Pond of Black Water en inglés y Kaludiya Pokuna en cingalés) pasa desapercibido, pero su visita es recomendable. Se encuentra a solo cinco minutos de la entrada principal y se trata de un lago artificial en el que los monjes se bañan para meditar. Junto a sus aguas aún podemos ver las ruinas del monasterio, además de otras estructuras como baños.
Testimonio de la avanzada civilización hidráulica de la antigua Sri Lanka, en las tablillas de Minintale, Kaludiya Pokuna se conoce con el nombre de Porodini. Según el ilustre Harry Charles Purvis Bell (1851-1937), el primer comisionado arqueológico de Sri Lanka, el complejo Kaludiya Pokuna fue construido por el rey Kassapa IV (912-929 d.C.).
Refectorio – Bat ge
También conocido como salón de la limosa, ya que fungía como espacio para alimentar tanto a los monjes como a los peregrinos que llegaban a Mihintale. Ubicado dentro del antiguo monasterio de Mihintale, la arquitectura de este antiguo edificio es similar a la del Maha Viharaya, pero destaca un sistema de tuberías para canalizar el agua. En el lado este del edificio había un espacio de piedra para hervir arroz y alimentar a los monjes y el patio central tiene dos grandes abrevaderos de piedra llamados bat oru.
Sannipata Sala (Salón de actos)
En las inmediaciones del refectorio, en otro plano, se encuentra el Salón de Actos de los monjes, un edificio de planta cuadrada abierta construido sobre 48 pilares de piedra con acceso desde cuatro direcciones. Justo en mitad de la sala hay un asiento elevado diseñado para el monje más veterano. Otra estancia, la Sala Sannipata se dedicaba a la reunión de los los monjes para discutir los asuntos del monasterio Mihintale.
Ruinas del Hospital – Vejja Sala
En la base de la montaña de Mihintale se encuentran también las ruinas de un hospital construido durante el siglo III d.C. por el rey Sena II. Además de restos como paredes y pilares de las celdas, también hay algunos baños de piedra monolíticos que probablemente se usaron para tratar a los pacientes sumergiendo a los enfermos para darse un baño de aceites de hierbas. Dichos baños fueron tallados en una sola roca y tenían una calidad escultórica digna de mención.
Las urnas de arcilla de color azul, según los arqueólogos, atestiguan los vínculos comerciales entre la antigua Persia (actual Irán) y la antigua Sri Lanka. La existencia del complejo hospitalario también fue registrada por el peregrino chino Bhikshu Fa-Hsien, quien visitó Lanka en el siglo V d.C. El hospital de Mihintale es un testimonio del avanzado conocimiento de la ciencia médica ayurvédica de la antigua Sri Lanka.
Museo de Mihintale
Al norte de las ruinas del hospital se encuentra el museo de Mihintale. La exposición más interesante es el modelo de una cámara de reliquias de una estupa. No debemos perder la oportunidad de ver lo que se encuentra dentro de la cámara de reliquias.
Complejo Indikatu Seya
El complejo Indikatu Seya está ubicado entre la escalera principal en la ladera este y el complejo Kaludiya Pokuna. El complejo Indikatu seya está rodeado por un muro de grandes piedras. Dentro de la pared hay dos estupas, la más grande de las cuales se llama Indikatu Seya.
La evidencia arquitectónica y epigráfica lleva a la conclusión de que el Complejo Indikatu Seya en Mihintale fue un monasterio que fomentó el budismo Mahayana. El budismo mahayana es una escuela de budismo que difiere, más en la práctica que en la teoría, de la escuela ortodoxa, el budismo hinayana, también llamado budismo theravada, del cual Sri Lanka es el renombrado custodio y depositario. Se cree que el complejo Indikatu Seya en Mihintale estuvo bajo la influencia de Abhayagiri Vihara, el centro neurálgico del budismo Mahayana en Sri Lanka en el siglo III d.C.
Entre la evidencia epigráfica hay una serie de fragmentos de texto budista escritos en sánscrito que pertenecieron a la escuela de budismo Mahayana.
ZONA MEDIA DE LA MONTAÑA
Estupa Kantaka Chethiya
A primera vista, esta estupa situada cerca del aparcamiento parece muy antigua, y se encuentra algo deteriorada por el paso de los siglos. La vista frontal principal de la llamada Vaahalkada es interesante ya que se pueden ver santuarios bien conservados, decoradas con elefantes y pavos reales junto con enanos míticos (Vamana o Bahirawa) en divertidas posturas y tallas de cabeza de mono, león y cabeza de elefante.
El propósito de los cuatro vahalkada orientados hacia los puntos cardinales sigue siendo desconocido y solo se elucubran conjeturas. Se piensa que evolucionó desde el altar en el que se ofrecen las flores, hasta completarse arquitectónicamente con la estupa en la que se consagraron las reliquias de Buda de los monjes budistas.
La estupa Kantaka Cethiya fue construida por el rey Suratissa en el siglo I a.C. y se cree que algunos de los monjes habían vivido en las cuevas cercanas a la estupa.
Sinha Pokuna (piscina de leones)
También junto al aparcamiento se hallan los restos de Sinha Pokuna (piscina de leones). Bellamente tallado en una roca hay una talla de un león que vierte agua en un hermoso recinto cuadrado, formando parte del antiguo sistema de suministro de agua de Mihintale.
Escalera
La gran escalera es otra característica de Mihintale que está situada en el lado este de la pendiente en 4 secciones. Desde la parte baja de la montaña la escalera tiene 1840 escalones hechos de granito, que conducen a la cima. Fueron construidos durante el reinado de Bhathika Abhaya, aunque un camino pavimentado posterior proporciona un atajo hasta el primer nivel.
La escalera simboliza el ascenso espiritual de los monjes budistas que vivían en este sereno monasterio. Hoy son los monos los que miran con curiosidad a los peregrinos y turistas que ascienden por la escalara camino de lo alto de la colina.
Justo al final de las escaleras, en una enorme roca hay una inscripción en una escritura protobrahami muy temprana, similar a la que se encuentra en la inscripción en el Monasterio Vesagiriya en Anuradhapura.
Al llegar a la explanada de la montaña se distinguen varios monumentos alrededor de la Estupa Ambasthala (Mango Tree Stupa), que ocupa el espacio central de la explanada. A un lado, sobre una colina la estupa Maha, al otro la inmensa estatua de Buda sentado, la roca Aradhana Gala, y sobre la explanada la estupa Ambasthala.
ZONA ALTA DE LA MONTAÑA
Estupa Ambasthala (Mango Tree Stupa)
La blanca estupa Ambasthala rodeada de pilares preside la montaña sagrada. Según el budismo fue el lugar del encuentro entre el rey Devanampiya Tissa y el monje Mahinda, y por esta razón vemos a su lado la estatua de Mahinda.
La estupa fue construida por el rey Kanittha Tissa entre el165-193 d. C., y como lo atestiguan los dos círculos concéntricos de pilares de piedra que lo rodean, Ambastala Dagoba, durante un cierto período estuvo protegida por una cubierta al estilo vatadage (Cetiyagara). Se trataba de dos círculos concéntricos de pilares de piedra octogonales similares a los de Thuparama (en la antigua capital real de Anuradhapura), y cuyo mejor ejemplo conservado podemos ver en el templo de Medirigiriya Vatadage ( en Polonnaruwa).
Si tenemos suerte podemos coincidir con las ofrendas en la que los monjes depositan flores, oran y hacen un ritual acompañado de cánticos y música.
Estatua de Buda
Una gigantesca estatua de Buda sentado preside uno de los promontorios rocosos en lo alto de Mihintales. Desde allí obtenemos preciosas fotografías de las estupas.
Aradhana Gala
Frente a la estupa Maha Saya en la cima de la colina se encuentra la roca llamada Aradhana Gala, la ubicación del primer sermón en la isla por Arahat Mahinda. Podemos trepar a la roca agarrándonos a las barandillas de hierro, pero con cuidado porque es una zona ventosa
Mihindu Guha – La cueva de Arahat Mahinda
Detrás de la Aradhana Gala un pequeño camino en el bosque hasta una roca de grandes dimensiones bajo la que una pequeña cavidad alberga la «cama de Mahinda», Mihindu Guha.
Estupa Maha
Desde la explanada una nueva serie de escaleras nos muestra el camino hacia la inmensa dagoba. En comparación con las enormes estupas de Anuradhapura, las de Mihintale eran de estructura simple y tamaño modesto. La estupa más grande de Mihintale es la de Maha Seya en forma de burbuja.
Fue construida por el rey Maha Dathika Maha Naga (67-79 d.C.), y aunque se haya reconstruido, sorprende su tamaño casi acaparando todo el espacio de la colina. Los fieles budistas creen que la estupa guarda reliquias (llamadas Urna Roma Dhatu) de Buda.
Tal es la vista panorámica, que incluso podemos ver a lo lejos las grandes estupas de Anuradhapura, solo superadas en su día por las Pirámides de Giza.
Mihindu Seya, la estupa de Mahinda
Junto a la estupa de Maha se encuentran los restos de Mihindu Maha Seya, estupa construida por el rey Uttica, el sucesor del rey Devanapiya Tissa, consagrando las reliquias del gran sabio Arhath Mahinda.
Naga Pokuna (Estanque de serpientes)
Al bajar de Ambastalya podemos torcer a la izquierda siguiendo un tramo de escalones que conducen a un estanque excavado en la roca. El pozo está custodiado por una cobra de cinco cabezas de serpientes talladas en la roca, cuya cola llega hasta el fondo del estanque. Nag o la cobra es el símbolo del guardián de los tesoros, protector del agua y procurador de la lluvia.
Festival Poson Poya
Durante el festival Mihintale se vuelve vibrante con miles de banderas budistas, lámparas de aceite de barro y de papel de colores. El Poson Poya (día de luna llena llamado Poson) en junio, conmemora la introducción del budismo en Lanka por parte de Arhath con una gran congregación de miles de peregrinos budistas.
Las salas de ofrendas están abiertas a todas las personas de todas las religiones, los rituales y sermones budistas se llevan a cabo día y noche durante un par de días en Mihintale y en toda la isla.
Horario de visita
De 8 AM – 5 PM
Excursiones y tours en Mihintale
Para visitar Mihintale con excursiones organizadas podemos optar por salidas de un día desde Negombo, Colombo o Anuradhapura por ejemplo, o de viajes organizados en los que contemos con chófer y guía en español.
Cómo llegar a Mihintale
Mihintale se encuentra a 15 km al este de Anuradhapura, la ciudad más antigua de Sri Lanka. Enclavada dentro de la provincia norte-central, en los límites del denominado Triángulo Cultural, Mihintale está a unos 220 km de Colombo y tardará unas 4,5 horas en llegar en coche.
Las opciones de tren y autobús pasan por llegar primero a Anuradhapura y desde allí, tendría que cambiar de vehículo (por ejemplo tuk tuk) para llegar a Mihintale.
Consejos visita Mihintale
El mejor momento para visitar Mihintale es temprano en la mañana o tarde en la noche, ya que el calor y el sol no serán tan intenso durante estas horas. Subir hasta la zona alta donde están las estupas y las estatuas requiere entre 20 y 30 minutos, y debería dedicar algo de tiempo para explorar las ruinas en su camino hacia la cima. Además, Mihintale ofrece una hermosa puesta de sol por lo que si se encuentra allí puede aprovechar para disfrutar del ocaso.
En cuanto a la ubicación geográfica, Mihintale se encuentra en la zona seca y no llueve mucho, por lo que cualquier época del año es buena para visitarla.
Dado que Mihintale es un lugar de culto budista, el código de vestimenta que cubra las piernas y hombros es obligatorio, además de descalzarse en la zona alta de la colina donde están los templos. También se espera que los visitantes sean respetuosos y silenciosos en los espacios religiosos como estas.
Dónde dormir en Mihintale
Anuradhapura está cerca de Mihintale y la mayoría de los turistas eligen quedarse allí ya que hay muchas opciones de alojamiento disponibles. Podrá elegir entre hoteles económicos hasta hoteles de lujo y boutique con encanto.