Galle, la preciosa ciudad de pasado colonial aparece siempre en todas las guías de viaje como punto imprescindible de parada. Situada en el sur de la isla de Sri Lanka, su fusión cultural y étnica enmarcado por un urbanismo y arquitectura de clara marca europea, hace de Galle un lugar exótico y peculiar.
Historia de Galle
Algunos historiadores creen o quieren ver en Galle, antigua ciudad de Tarsis, donde el rey Salomón obtuvo gemas y especias, mencionada en la Biblia. Pero mitos aparte, poco se conoce del pasado de Galle antes de la llegada de los europeos, ya que no hay testimonios escritos.
Se cuenta que una expedición portuguesa fue desviada en el siglo a principios del XVI por una tormenta en su travesía a Mauricio, y resguardada en Galle, asentó un pequeño asentamiento que le permitió comerciar con los monarcas cingaleses. La leyenda del nombre proviene de los supuestos sonidos de un gallo (galo en portugués), pero parece más probable que sea una derivación de «Gala» que en la lengua nativa alude a las rocas.
En uno de los periodos tensos, los portugueses fortificaron la península en 1589, aprovechando que estaba rodeada por agua en tres de los cuatro lados, y le dieron el nombre de Santa Cruz.
Posteriormente, la ciudad de Galle fue conquistada por los holandeses en el siglo XVII (1640) y se hicieron más robustas las murallas con baluartes defensivos y un perímetro que sustituyó por completo al precedente de los colonos portugueses.
Durante 200 años Galle se convirtió en el principal puerto de Sri Lanka, escala de los barcos entre Asia y Europa. Algo que solo cambió con la llegada de los ingleses en 1796, que apostaron por Colombo y el puerto protegido por amplios espigones que construyeron para atracar navíos de mayor calado y envergadura.
Hoy del pasado marinero quedan embarcaciones de recreo y barcos que esperan descansando en la arena a que los pescadores los arrastren con las primeras y últimas noches del día.
Afortunadamente, debido a las altas murallas del muro del fuerte, gran parte de esta área sobrevivió al tsunami del 2004, lo que significa que se conservan intactos muchos edificios de época colonial, portuguesa y holandesa.
Qué ver en Galle
Galle merece más que el clásico y atropellado paseo rápido por las murallas. Muchos de sus rincones se descubren andando sin un rumbo preestablecido, y si bien es cierto que que Galle se ha convertido en un reclamo del turismo gracias a la designación de Patrimonio Unesco, hay espacios en los que se palpa la vida local.
Entre edificios y mansiones coloniales que se han reconvertido en hoteles boutique, modernas cafeterías y restaurantes con platos locales, encontramos tiendas de artesanía que alternan con talleres de arte gestionados por extranjeros que se han establecido en Galle. La mezcla de edificios religiosos demuestra esa convivencia sana y respetuosa, con iglesias, mezquitas, templos budistas y jardines junto a los bastiones que invitan a pasear por las murallas de Fort.
FORT
Situado en una península rocosa, el mar rodea el fuerte de Galle por tres lados, lo que lo convierte en un lugar maravilloso para un fuerte. La fortificación, llamada comúnmente Fort, rodea Galle, siendo el «cascarón» que protege varios monumentos y edificios coloniales. Unesco quiso premiarla con el estatus de Patrimonio de la Humanidad en1988, reconociendo la combinación de arquitectura, arqueología e historia rodeada de un hermoso paisaje tropical.
Callejuelas estrechas y bulliciosas y reliquias coloniales en ruinas, un aroma siempre presente de especias exóticas y el increíble entorno tropical. Galle Fort se está gentrificando rápidamente a medida que las elegantes boutiques, cafés y hoteles comienzan a ubicarse en edificios coloniales holandeses restaurados, pero afortunadamente solo se necesita apartarse un par de calles para sentir como si hubiera viajado de nuevo al siglo XVIII.
Descubra los lugares más famosos, sitios históricos, puntos de vista del atardecer y la mejor comida con nuestra completa lista de cosas que debe hacer en Galle Fort!
Las calles de Fort
Los pintorescos nombres de las calles del antiguo fuerte en Galle, Sri Lanka, son un legado del pasado colonial holandés de la ciudad. Después de capturar el fuerte de los portugueses en 1649, los holandeses fortificaron el sitio con murallas y bastiones de granito y coral, asegurando su conservación.
Leyn Baan Street es uno de los pocos nombres de calles que los británicos que derrocaron a los holandeses en 1796 no anglicanizaron. El nombre proviene del holandés Lijnbaan o ropewalk, una posible referencia a los recolectores de cocos de Sri Lanka, o quizás en referencia a una calle. donde se hilaba la cuerda de coco.
Lighthouse Street no conduce curiosamente a un faro. El antiguo faro construido por los británicos en 1848 fue destruido por un incendio en 1934. La nueva estructura está ubicada a unos 150 metros al este del sitio original.
Marskramerstraat se convirtió en inglés a Pedlar Street, una traducción literal. Se desconoce la identidad de los vendedores ambulantes a los que se hace referencia aquí. Los comerciantes en Sri Lanka en ese momento eran predominantemente del grupo social musulmán o chettie (tamil).
Chando Street era Chiandostraat bajo los holandeses. El término Chiando es posiblemente un remanente del portugués para «graznido», ya que no proviene del holandés.
La iglesia a la que se hace referencia en Church Street o Kerkstraat es probablemente una previa a la actual Groote Kerk (Iglesia holandesa) construida en 1755, ubicada justo al norte de la calle.
Parawa Street fue Parruasstraat durante el período holandés. El nombre probablemente deriva de la comunidad Paravar de pescadores y comerciantes marítimos del sur de la India que pueden haber tenido presencia en el fuerte.
Murallas
Si los muros construidos con coral y piedra pudieran hablar, nos contarían muchas historias que ha vivido Galle Fort. Un paseo muy agradable nos lleva por las murallas ‘Fort Walk’, comenzando en la histórica Torre del Reloj, antes de pasar a la Puerta principal, en dirección sur hacia el interior del Fuerte, pasando la iglesia reformada holandesa hasta llegar al hospital holandés restaurado de la sección occidental.
Desde allí, continúa hacia el sur hacia el famoso faro de Galle, antes de seguir las murallas hasta la Mezquita Meeran, Flag Rock y Triton Bastion. El paseo termina en Star Bastion, con vistas a la costa norte hacia Hikkaduwa.
En el camino es habitual ver a los lugareños jugando al cricket, tomando un aperitivo junto al mar o paseando en las últimas horas del día cuando el sol no aprieta con tanta fuerza.
Torre del reloj
La Torre del reloj es uno de los monumentos que ya se atisba al entrar por la Gran Puerta. Se alza sobre el bastión de la Luna y su construcción se llevó a cabo en 1883 a partir de una colecta de los ciudadanos de Galle en reconocimiento al Dr. P.D Anthonisz por su labor como médico en el Hospital Militar de Galle, y especialmente por su oposición a demoler las murallas del fuerte holandés del siglo XVII. Anthonisz argumentó que el fuerte brindaba protección contra las inundaciones de las mareas monzónicas y los barcos anclados en el puerto, un hecho que luego se demostró con el tsunami de 2004.
Flag Rock Bastion
Situado en el extremo sur de Galle, muy cerca del Faro, este imponente bastión construido por los portugueses para la defensa de la ciudad, es uno de los puntos más fotogénicos de la ciudad.
En el Flag Rock Bastion suelen estar saltadores que hacen sus piruetas acrobáticas. Algunos lo hacen por puro placer, y otros prácticamente se dedican a ello, esperando alguna moneda por las fotografías.
El faro del fuerte de Galle
En una de las esquinas de Fort, opuesto en diagonal a la Torre del Reloj, el faro de Galle se alza enmarcado por palmeras. Casi salido de una postal junto al mar, el hermoso faro blanco data de 1848 (aunque la estructura actual fue reconstruida en 1939 tras un incendio en 1934). Aún hoy, el que es el faro más antiguo de Sri Lanka, guía a los barcos hacia el puerto de Galle, especialmente a los pescadores que no cuentan con instrumentos electrónicos que los permitan navegar de forma segura.
Aunque no se puede visitar por dentro, ni subir a lo alto, puesto que hoy en día aún se sigue utilizando, son muchos los que se acercan a su base para sacar una de las fotografías más icónicas. Con sus 26 metros sirve también de guía para ubicarnos cuando os movemos por las calles de Fort.
Junto al faro situado en Rampart Street y sobre el bastión de Point Utrecht, hay una pequeña playa, conocida como “Light House Beach”, en la que la gente local se refresca cuando el calor tropical cala los huesos.
La puesta de sol al atardecer, con vistas al faro de Galle, es una de las mejores actividades para dejarse embaucar por la antigua ciudad colonial.
Mezquita Meeran Jumma Masjid
La Meeran Jumma Masjid, al final de Leyn Baan, es el templo musulmán más significativo, construido en 1904 sobre un edifico de 1750, para la destacada comunidad. Frente al faro de Galle, su blanca fachada brilla con la luz del sol al atardecer. Las influencias estéticas son curiosas, con elementos que sugieren toques barrocos, guiños al pasado victoriano de la colonia británica y por supuesto diferentes elementos islámicos.
Iglesia holandesa
La iglesia holandesa, ‘Groote Kerk,’ en holandés fue construida en el siglo XVII, en 1755. Es la iglesia protestante más antigua de Sri Lanka y continúa en uso en la actualidad. En su interior podemos admirar la arquitectura colonial, el órgano, un púlpito e impresionantes vitrales. Las lápidas conmemorativas distintivas de los excomandantes de Galle sirven como un recordatorio de los colonialistas holandeses y algunas provienen de cementerios más antiguos que se cerraron en 1710 y 1804. Frente a la iglesia se alza una espadaña cuyo origen se remonta a principios del siglo XVIII y una curiosidad es que existen túneles subterráneos que van desde la iglesia hasta la Casa del Gobernador, al lado del New Oriental Hotel.
Casa del gobernador Amangalla
En la misma Church Street un edificio civil de gran tamaño sobresale. Hoy ocupado por un hotel cinco estrellas, fue la morada del gobernador holandés, construida en 1684, y que ha alojado a todo tipo de personalidades durante su estancia en Galle.
Iglesia Anglicana
Cuando llegaron los británicos y se convirtieron en los gestores de Sri Lanka, erigieron su propio templo, una iglesia anglicana de estilo gótico, fechada en 1871.
Old Dutch Hospital
El antiguo hospital holandés de la calle Hospital Road es uno de los edificios más antiguos de Galle. Debido a los numerosos afectados por las enfermedades tropicales, los colones holandeses eran curados en este hospital. Su hermoso corredor de arcos blancos contrasta con el techo de tejas naranjas. Hoy en día reúne a un buen puñado de restaurantes y cafeterías. El restaurante más recomendado es A Minute by TukTuk, convertido en uno de los lugares clásicos para comer en Galle.
Law Court Square
A unos pasos del antiguo hospital holandés encontramos una plaza cuadrada en la que inmensos ejemplares de árboles hacen sombra con su espeso follaje y lianas. Court Square recibe el nombre porque está frente al edificio de la corte de magistrados de Galle. En minúsculas oficinas los abogados asesoran a sus clientes, y resulta un espectáculo ver como trabajan aún con sus carpetas y archivadores, asesorando jurídicamente.
Old Gate
Cerca de Court Square está la Old Gate, la Puerta Vieja que tenía el acceso junto al mar y el puerto en el que desembarcaban los productos llegados indistintamente de Europa o del resto de Asia.
En cada uno de los lados de la Old Gate hay una inscripción de los periodos colonizadores holandés y británico. En el exterior se distingue un escudo de armas británico con sus dos leones y en el interior de la puerta hay una inscripción de la compañía holandesa de las Indias Orientales “Verenigde Oostindische Compagnie”.
Templo budistas Sri Sudharmalaya
El interior de la fortificación hay templos para todas las religiones, y no podía faltar uno budista. El Sri Sudharmalaya Buddhist Temple se terminó en 1889, presidido por la figura de un Buda mirando hacia el mar en el exterior.
De compras en Pedlar Street
Pese a que los precios en Galle son más altos que en otras zonas, resulta irresistible hacer algunas compras en las calles de Fort.
Hay multitud de boutiques, galerías de arte, tiendas de especias, gemas, joyas, y artesanías, siendo Pedlar St el epicentro comercial. Algunas reconocidas son Stick No Bills: vende increíbles estampados retro ‘Ceylon’; MimiMango: perfecto para mujeres, vende ropa y accesorios al estilo de Sri Lanka; Shoba Display Gallery: un taller de encaje tradicional; Koccoriko Paola: textiles bien confeccionados, así como algunas artesanías; Exotic Roots: una boutique dirigida por madre e hija que vende artesanías y obras de arte hechas por los propios propietarios.; KK Boutique: una hermosa tienda amplia para todo tipo de artículos para el hogar.; Embark: Una tienda original y colorida de ropa y artículos para el hogar. ¡Las ganancias apoyan a los perros callejeros de Sri Lanka.
Museos de Galle
Contando con un poco de tiempo podemos conocer alguno de los museos de Galle. Los más destacados son la Mansión Histórica situada en Leyn Baan Street, no lejos del bastión Aurora. Posee una colección privada de una familia local de época colonial, y nos sitúa en la vida más opulenta de los colones. El horario para entrar a ver esta mansión es de 9.00 a 19.00, y además de los objetos merece la pena el patio interior. El acceso es gratuito.
Otro de los museos el Museo Nacional de Arqueología Marítima, centrado en la historia marina de Galle y Sri Lanka. Además del pasado comercial con objetos rescatados de naufragios y barcos hundidos en la costa, el antiguo almacén holandés del siglo XVII tiene una muestra de imágenes antes y después del tsunami de 2004.
También merece destacar el Museo Nacional de Galle de Church Street, en otro bonito edificio neerlandés de 1656, ofreciendo un recorrido histórico de los colonizadores lusos, holandeses y británicos, a través de objetos que se comerciaban en la época como conchas de tortuga, tejidos de encaje Beeralu, o máscaras de madera tradicional tallada.
Ya fuera de Fort y de Galle, el Museo Folclórico Martin Wickramasinghe en Koggala se centra en objetos antropológicos de Sri Lanka, exhibidos en el interior de la casa de uno de los escritores nacionales más notables.
Contacto con la cultura y la gente local
Si salimos de Fort notaremos que nos adentramos en una Galle diferente. La gente joven juega a cricket en … y sentados en la playa los marineros charlan sobre la pesca que han hecho faenando, mientras esperan que la gente compre sus capturas que serán parte de los platos que probaremos después en los restaurantes.
Atardeceres en las murallas
Cada tarde, alrededor de las 17:30 p. m., lugareños y turistas se reúnen a lo largo de los muros del fuerte para ver la puesta de sol sobre el Océano Índico. Es un momento de calma y reencuentro en el que familias enteras se reúnen para despedir el día, mientras los viajeros se afanan en retratar el cielo con todo tipo de tonos de azul, naranja, rosa y púrpura.
El mejor punto para ver la puesta de sol es Triton Bastion, sin embargo, puedes ver la puesta de sol desde prácticamente cualquier punto en el lado occidental de los muros del Fuerte.
Galle fuera de las murallas de Fort
Uno de los pecados es pensar que solo dentro de las murallas está lo mejor de Galle. Pero si buscamos interactuar con la gente, salir fuera de Fort nos permitirá palpar la realidad.
El deporte nacional de Sri Lanka es el cricket, y aquí, en el sur del país, es en gran medida una religión. Mires donde mires, verás que se juega un partido de cricket, ya sean niños y jóvenes, o adultos en partidos mucho más competidos. Galle Fort es el hogar de uno de los campos de cricket más pintorescos del mundo, el Galle International Cricket Ground.
Su origen está en 1876 cuando nació como un hipódromo, y no fue hasta 1927 cuando se estableció oficialmente el estadio de críquet., remodelado en 2007 tras la destrucción ocasionada por el tsunami.
Ubicado justo en la entrada del Fuerte, el campo es sede de partidos internacionales durante todo el año. Desde la torre del reloj de Galle Fort se observa el campo, que desafortunadamente parece tener fecha de caducidad, ya que hay planes para demolerlo.
Aromas de mercado
Saliendo de Fort y siguiendo la costa encontraremos diferentes mercados en los que salir de la zona de confort turística, y disfrutar de la vida callejera de Galle. El primero es el Rajgama Wella – Fish Market, que en realidad son puestos al aire libre en los que los pescadores ponen lo que han faenado junto a los barcos varados en la arena.
Si seguimos caminando veremos como se suceden los puestos de fruta, con algunas exóticas que además tienen unos sabores maravillosos como el mangostán, una extraña fruta tipo lichi que es absolutamente deliciosa. También venden flores e incienso.
A la altura del número 130 de Galle Main Street nos toparemos con pequeño templo custodiado por una estatua de Buda. Inmediatamente detrás de la estatua se encuentra el mercado de especias
Old Dutch Market
El Old Dutch Market en Galle es uno de los vestigios únicos de la época colonial. Como sugiere el nombre, es un mercado, popular entre los lugareños y los turistas para vender algunos de los productos más frescos y exóticos de todo Galle.
Los mercados también son un gran lugar para abastecerse de especias y mezcla de curry. No pudimos resistirnos a abastecernos de una mezcla de dhal, uno de nuestros curries favoritos de Sri Lanka. Las especias aquí cuestan aproximadamente una décima parte del precio de las que están dentro de los muros del fuerte, por lo que vale la pena visitarlo. De hecho, casi todos los lugareños de Sri Lanka le advertirán que no compre té y especias en las boutiques de moda como Spa Ceylon: las cosas buenas están aquí, donde compran.
Templo Hindú Sri Kathirvelayutha Swami Kovil
En el sur de Sri Lanka no es muy habitual encontrar templos hinduistas, normalmente asociados a la etnia tamil. Pero en Galle encontramos el Sri Kathirvelayutha Swami Kovil (también llamado Templo Kathiresan), un santuario hindú situado en Kaluwella, en la carretera que sale hacia el norte desde la estación de tren y autobús.
Se cree que el templo dedicado al dios Murugan (o Kataragama) se construyó en 1790 d. C. como un lugar de culto para los hindúes indios que habían venido a Galle comerciando durante el período colonial. El Kovil (templo) tiene características arquitectónicas tanto hindúes como holandesas.
Cómo llegar a Galle en Sri Lanka
Galle tiene excelentes conexiones de transporte ya que es uno de los destinos más populares de la costa sur de Sri Lanka.
En tren
Puede tomar el tren desde Colombo en aproximadamente 2-3 horas, directamente a la estación de tren de Galle Fort. La frecuencia suele ser de un tren cada hora.
En autobús
Otra opción de transporte asequible en Sri Lanka. Hay varios autobuses locales (la opción más barata), así como un autobús EX001 más agradable desde Maharagama (en las afueras de Colombo) a Galle que va por la autopista, y que también sale desde el aeropuerto internacional de Colombo. La frecuencia es cada veinte minutos.
En taxi
El taxi es la opción más cara pero también la más conveniente si tiene un itinerario corto.
En tuktuk
El precio de los tuk tuk ronda el 50-75% de lo que costaría un taxi. Sin embargo, no recomendamos los tuktuks para un viaje de más de una hora.
Transporte Privado – Coche con conductor en Sri Lanka
Contratar un chófer proporciona mucha libertad de movimientos y no depender de horarios. Más información de circuitos por Sri Lanka con conductor.
Dónde dormir en Galle -Hoteles y alojamiento
Aunque los precios para alojarse en Galle sean más caros en el interior de la fortaleza, es donde están todas las boutiques, cafés y lugares de interés. Algunas opciones interesantes para dormir en Galle son:
The Merchant Galle Fort un alojamiento con mucho encanto, tranquilo, céntrico y con un restaurante de gran calidad. Secret Garden Galle Fort (económico hotel boutique pero funcional), The Heritage Hotel: un hotel de lujo en un edificio holandés de 300 años de antigüedad, con uno de los mejores restaurantes de Galle; Fort Printers: un hotel boutique con 13 suites, en una mansión del siglo XVIII en Galle Fort; Villas Taru: un hotel boutique restaurado de forma clásica justo en el corazón de Galle Fort; The Fort Bazzar: una antigua casa de comerciantes convertida en hotel boutique en el centro de Galle Fort.
Dónde comer en Galle
Gran parte de las opciones para comer están dentro de las murallas de Fort, sobre todo las turísticas. Y aún teniendo precios más elevados de lo habitual en Sri Lanka, podremos encontrar opciones para todos los bolsillos y gustos. En Pedlar’s Street hay restaurantes muy recomendables, algunos son parte de hoteles, mientras que en el Antiguo Hospital Holandés suele haber mucho ambiente de noche, tanto para comer como para tomar unas copas o cervezas.
Poonie’s Kitchen es un pequeño jardín secreto mágico, escondido en un patio detrás de la boutique MimiMango. Tiene opciones sin gluten como el tazón de ensalada ‘thali’. Basado en un ‘thali’ indio, es una mezcla de sabores deliciosamente frescos. Otros platos que vale la pena probar incluyen la sopa tailandesa de gambas con calabaza, coco y lima, y si buscas un postre, prueba su famoso pastel de zanahoria .
En Sugar Bistro podemos deleitarnos con los clásicos de la cocina de Sri Lanka. Prueba el Lamprais cocinado en hoja de plátano. En Buhoneros Inn tenemos comida occidental y local, incluso pizza o pasta. En Indian Hut los precios son baratos y la comida sabrosa ( cerca del faro de Galle), y el Ameen Hotel también tiene platos de comida local a buen precio. Y para recargar fuerzas con los desayunos el Pedlar’s Inn Café.
Lucky Fort Restaurant tiene opciones para comer barato y la hamburguesa The original Rocket Burger es una alternativa a la comida local. En Chambers Restaurant comeremos sabrosos platos turcos y del Medio Oriente, no tan económicos pero nada caros. Dimo Fort en el hospital holandés es perfecto para un curry de cangrejo fresco.
Y hablando de helados, son recomendables Gelato Island con muchos sabores de Sri Lanka, así que prueba el sorbetto de jaca para una sensación de sabor; Buhoneros Inn Gelataria, un poco caro, pero buen helado; y Dairy King, heladería en el extremo sur de Galle Fort, con helados caseros de mango, maracuyá y coco.
Excursiones cerca de Galle
Desde Galle podemos hacer excursiones a algunas de las mejores playas que se encuentran a sus afueras, como Unawatuna, Welligama o Mirissa, punto de salida de muchas excursiones para ver ballenas.
Para los más activos está la Jungle Beach de Unawatuna, que además de la playa ofrece opciones para caminar por la selva o subir en bote. Mientras que una visita curiosa es la Pagoda de la Paz, una iniciativa para establecer la paz durante los años de guerra civil de Sri Lanka. La Pagoda es un espectáculo digno de presenciar, especialmente cuando la ves desde el lado de Unawatuna, lo que hace que parezca que ha surgido de la jungla.
¿Buscando más aventuras? Entonces haga un tour al bosque de Kanneliya, perfecto para conocer la naturaleza más salvaje del sur de Sri Lanka. Allí puedes bañarte en las pozas y ver la catarata de Anagimale.
¿Cuando es la mejor época para visitar Galle?
Sri Lanka tiene dos temporadas de monzones que ocurren en épocas opuestas del año en lados opuestos de la isla. En Galle, la mayor parte de la lluvia cae entre mayo y septiembre, y durante este tiempo, el océano puede ponerse muy agitado, lo que hace que las playas estén más sucias de lo habitual. Sin embargo, los precios de alojamiento en la temporada del monzón son mucho más bajos, y las calles más tranquilas de Galle lo convierten en un excelente momento para hacer turismo.
Cualquier momento entre octubre y abril es un buen momento para visitar Galle, ya que las lluvias monzónicas han pasado y las temperaturas son bastante estables. Para días soleados y secos, visite Galle entre diciembre y abril, siendo febrero el mejor mes.